domingo, 10 de noviembre de 2013

Mujeres y Política Más de mil días...y nada



Mujeres y Política
Más de mil días...y nada

Soledad JARQUÍN EDGAR
En cosa de días el titular del ejecutivo local, Gabino Cué Monteagudo, rendirá su tercer informe de gobierno. Nadie sabe qué es lo que exactamente va decir, porque este 2013 ha sido un año patas para arriba,  consecuencia clara de los otros dos años, donde primero trataron de encontrar el rumbo, sin caminos claros. Percepción de una buena parte de la ciudadanía.
Es notoria y evidente la falta de gobierno. Es evidente porque se reciente, pega, molesta a buena parte de la ciudadanía que no ve nada por ningún lado, excepto la emergencia de una clase política “gobernante” de muchos colores, sirviendo a intereses que ni siquiera son partidistas sino particulares, donde el mandatario es una especie de figura decorativa porque otros se despachan con la cuchara grande. Y no es partidista porque los institutos políticos están desechos, quebrantados, minados.
A la mitad del camino le quedan cinco de los 11 integrantes de gabinetazo original: la contralora Perla Woolrich; el titular de SINFRA, Netzahualcóyotl Salvatierra; el secretario del Trabajo, Daniel Juárez López, el aristócrata secretario de Turismo y Desarrollo Económico, Lic. José Zorrilla y el titular de los Servicios de Salud, Germán Tenorio. Este último agarrado con uñas y dientes, y favorecido por la venia de su amigo el mandatario oaxaqueño que ignora sus yerros, la solicitud de más de 50 mil mujeres y hombres que pidieron su salida tras el vergonzoso caso de una mujer que parió a su hijo en el jardín de una clínica en San Felipe Jalapa de Díaz y que se volvió repetir en San Antonio de la Cal. Reflejo evidente de que lo que menos importa es la vida de las mujeres. Así de simple y de sencillo, a pesar de los hechos mediáticos que se sacan de la manga y que parecen una burla cínica
No es un secreto que tras el trono de Gabino Cué opera un sagaz muchacho al que le gustan los negocios, nunca lícitos, y llevarse a su cuenta bancaria grandes sumas de dinero del erario público. Una especie de tributo a un pequeño rey. Se llama Jorge Castillo y que hoy se le conoce como Jorge “Chuky II” Castillo, en memoria de aquel otro que más o menos hizo lo mismo en tiempos del temible Ulises Ruiz. Comparados los Chukys, aquel podría quedar en una caricatura. Hoy se sabe la renuncia del procurador Manuel de Jesús López, quien ya sabemos no se queda fuera de la nómina y que alcanza el honorable cargo de “coordinador de asesores” (léase como puesto de consolación y la antesala a la banca), se debió a que Chuky II quiere decidir en todas partes, lo que ya no le gustó al ex procurador y pidió irse “insatisfecho”, declaró a la prensa local. Salida “honorable” para el nuevo coordinador de Asesores del gobernador Gabino Cué.
Lo que no hay en quienes tienen un cargo en el Gabinetazo es ética profesional, porque lo mismo sirven para un barrido que para un fregado, es decir, hoy pueden ser una cosa y mañana desempeñarse en otra. Lo que sí hay son facciones reclamando el pago a sus favores, llámense ex gobernadores, como Diódoro Carrasco, y claro los dirigentes más encumbrados de los partidos políticos que coaligados lograron arrancarle al PRI el gobierno tras siete décadas de hegemonía.
El espíritu de los ungidos, profesionistas y empresarios con estrellita dorada en la frente, los llamados a transformar Oaxaca se evaporó en dos o tres suspiros. No encontraron en poco más de mil días la ruta. Y aunque Oaxaca no es una empresa, los secretarios de estado-empresarios hallaron el mecanismo para seguir haciendo negocios en el turismo, en la infraestructura o en la salud, a estas alturas ya nadie se acuerda de los grandes planes que se truncaron sin remedio.
Sin dientes y en su soledad, aconsejado por los menos y mal, Gabino Cué no tuvo otro camino que la asistencia pública, por eso sus audiencias donde reparte “remedios”, pone cara de bueno, escucha quejas, solicitudes de empleo. El ejemplo de su política asistencial son las cocinas comunitarias ¿y los recursos apá? desaparecieron, o los programas que parecen salir de la chistera del mago, son pura ilusión, y como toda ilusión duran poco y terminan sin resolver de fondo la pobreza y sus inimaginables consecuencias.
Cué ha dejado de gobernar. Sólo asienta con la cabeza. Deja que otros hagan esa chamba, como sucede, decía antes, con el caso de Jorge Chuky II Castillo.
Pero no es el único. En la Secretaría de Finanzas, Enrique Arnaud Viñas, el segundo titular en ese puesto, relevando a Gerardo Cajiga Estrada, quien también, todo se sabe, no quería renunciar pero lo renunciaron, aún cuando quería seguir en tan importante encargo, por eso espetó a su entonces jefe y amigo (Gabino Cué): "Y porqué chingados voy a renunciar....si ya me acordé para que estoy aquí", dijo y citó al amigo de ambos, el hijo desobediente de Ciucatlán de los Carrasco Altamirano. Y como todos (los servidores públicos) se despachan con la cuchara grande, antes de irse, Cajiga logró convencer a Gabino sobre la “necesidad” y la importancia de un Centro de Diseño para Oaxaca, se creó y la dirección se puso en manos de su esposa Lizbeth Galván y no conforme con eso, la nueva instancia gubernamental recibió un presupuesto más grande, peso sobre peso, incluso, que el que tenía en 2012 el Instituto de la Mujer Oaxaqueña (por eso digo que en Oaxaca lo que no importan son las mujeres, misoginia institucional).
Finanzas es desde entonces un dolor de cabeza para otras dependencias, como el propio IMO y el IEEA, que claramente han sufrido con la burocracia de la súper-secretaría, que jinetea el dinero, como han dicho servidores públicos afectados, porque el personal no recibe, como dice la ley, su pago cada tanto, sólo las protestas y las denuncias públicas hicieron posible resarcir el daño tras meses de trabajo. Curioso pero una mayoría de ese personal son mujeres que habría que decir de paso son contratadas bajo un sistema violatorio a las leyes mexicanas (otra vez, la maldición misógina).
Hoy, Enrique Arnaud Viñas, es el titular de la Secretaría de Finanzas, cuota del oriundo de Cuicatlán, ¿acaso ya olvidamos que Arnaud ocupó ese cargo cuando Carrasco Altamirano era gobernador? Claro, muy claro, más claro que el agua que distribuye Adosapaco. Pues, bien, Arnaud Viñas, también de la aristocracia de Oaxaca, aparece en el escenario sin equipo y debe hacer su trabajo con aquellas personas que dejó su antecesor, es decir, Gerardo Cajiga. Un caso concreto es la directora de Auditoría e Inspección Fiscal, Iris Ramírez de la Rosa, quien por si fuera poco era o es el “dedo chiquito” del ex titular de Finanzas y el otro Juan Alba Valadez, asesor y luego –sacado de la chistera- lo empiezan a llamar Procurador Fiscal, cargo que existe, pero el que no existe como tal es el propio Alba, que junto con Ramírez son amos y señores y por tanto disponen.
Los intocables, como podría llamarse a Arnaud Viñas y al equipo completo que heredó, hacen y deshacen, hacia adentro y, claro, también hacia fuera. De ahí que la queja ciudadana, por aquí y por allá sea la misma: el abuso contra contribuyentes. Y cuando, finalmente encuentran la horma de su zapato, se emberrinchan y casi mueren. Eso pasó cuando la PRODECON les pidió información como resultado de las muchas quejas presentadas ante el organismo defensor de los derechos del contribuyente.
Claro que la soberbia fue más grande que la colaboración y la responsabilidad y optaron por ignorar a la PRODECON, lo que provocó que el propio Arnaud Viñas se ganara no una sino varias multas. Resultado, se desataron los demonios. En realidad, el Secretario de Finanzas debería mirar hacia adentro y reconocer que sus “heredados colaboradores cercanos”, incluso el secretario particular Francisco Díaz, son quienes obstaculizan su trabajo en servicio a su ex jefe Gerardo Cajiga.
Así son las cosas  en el gobierno de Gabino Cué Monteagudo, quien ya convoca a la clase política local a su informe, donde hará cuentas alegres de su gestión gubernamental, las mismas que no se reflejan por ningún lado. Lo que sí se puede decir, por evidente, es que Cué ha cambiado las cosas, sólo que en beneficio del pequeño grupo, favorecido por el poder y los recursos públicos. Y, sin cambio alguno, repetirá la historia de siempre, la misma que ejecutó el priismo: el ritual del besa manos, del aplauso prolongado frente a las frases “históricas” pero que se desbaratan por falta de hechos y las promesas que siguen en ese estado perpetuo de lo intangible, por la simple razón de ser promesas.
@jarquinedgar




A reserva ¿Demagogia?




A reserva
¿Demagogia?

Bárbara GARCÍA CHÁVEZ

Una de las bandera de campaña de Enrique Peña Nieto fue y parece que aún la cacarea, la “creación de un Sistema de Seguridad Social Universal, para garantizar a todos los mexicanos condiciones mínimas de bienestar, que tiene que ver con la atención a la salud, un seguro de desempleo y una pensión para el retiro como elementos fundamentales de este sistema de seguridad social universal"
Tres asuntos a cual más de peliagudos, en un país cuyas condiciones históricas, socio económicas y por supuesto políticas, han situado determinante y reiterativamente al pueblo mexicano en escenarios de pobreza desde alimentaria hasta la cualquier otra denominación que califique la ausencia de dignidad y bienestar de millones de personas.
La pobreza viola una amplia gama de derechos humanos que comienzan con el derecho a la integridad física. La prioridad del derecho a la supervivencia y a las necesidades básicas es una consecuencia natural del derecho a la seguridad personal. La pobreza somete a quien la padece a un entramado de relaciones en las que se les privan de múltiples bienes tanto materiales como simbólicos, de trascendencia universal, que son imprescindibles para el desarrollo humano. La pobreza es una condición que se caracteriza por la privación continua o crónica de los recursos, de la capacidad, de las opciones, de la seguridad y del poder necesario para vivir dignamente y ejercer los derechos civiles, culturales, económicos, políticos y sociales que toda persona posee por el hecho de nacer.
 Cierto es que estas medidas anunciadas son el reconocimiento patente de la exclusión de millones de personas a una vida digna, derechos humanos que en nuestro país se han violentado sistemáticamente –el derecho a la salud, al trabajo digno y el derecho de los adultos mayores a recibir una pensión para apoyar sus gastos básicos de manutención durante la vejez-. Medidas que implican reformas constitucionales y que no se hacen realidad, hasta que son verdaderamente aplicadas y evaluadas. Es decir hoy por hoy para la ciudadanía siguen en declaraciones propias de campaña política…habrá que ver.
Lo que sí es posible revisar a conciencia es lo que existe y padecemos y casi especular en tanto a las posibilidades respecto a los beneficios sociales prometidos:
El derecho fundamental a la salud, inaccesible para millones de personas en México, injusto para quienes no cuentan con empleo formal, están en una posición vulnerable considerando que uno de los gastos más importantes es el que se refiere precisamente al cuidado de la salud, y en muchos casos puede significar la pérdida absoluta del patrimonio familiar y en el peor de los casos, sin contar la posibilidad de la muerte de personas a la falta de recursos económicos que son necesarios para costear la atención médica.
La reforma, no es novedosa en tanto desde 2004 entra en vigor el esquema de seguridad universal denominado Sistema de Protección Social en Salud, identificado como Seguro Popular, que pretende ofrecer  acceso igualitario de un aseguramiento médico público a la población no asalariada. Sin embargo según cifras del INEGI, solo 65 de cada 100 personas tienen derecho a servicios médicos de alguna institución pública o privada, 23 de estas son atendidas a través del Seguro Popular.
Si traducimos estas cifras a los millones de personas que no cuentan aún con servicio médico estaremos hablando de casi 40 millones de mujeres y hombres a los que se les viola este derecho fundamental, independientemente de quienes pueden acudir a los servicios de salud gratuitos y se enfrentan con los pésimos servicios y la falta de medicamentos indispensables en un cuadro básico.
El seguro de desempleo en un país donde el desempleo crece desproporcionalmente en comparación con la población y se incrementan cifras y fenómenos como  el tercer porcentaje más alto entre los 34 países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) de jóvenes que no estudian ni trabajan, solo por debajo de Turquía e Israel, situación que representa una falla estructural que implica la pérdida de oportunidades para un desarrollo pleno.
El “empleo” en el sector informal puede considerarse en muchas ocasiones como una fuente de sobrevivencia, que además está estrechamente ligada a la pobreza. Estas personas son llevadas a elegir la informalidad con base en una simple reflexión costo-beneficio, entre el costo de la formalidad –en el que toman en cuenta los gastos adicionales y los complicados trámites y requisitos– contra los beneficios de la informalidad, a pesar de que esta contempla la renuncia a asuntos como la protección legal, la seguridad social y de manera específica el acceso a los servicios de salud gratuita que representa alrededor del 30 por ciento de la población.
Tal vez lo primero que se tendría que atacar es la crisis permanente y la falta de estrategias formales para abatir el desempleo, si consideramos que de acuerdo con la estimación del crecimiento de la población, México necesita crear alrededor de 800 mil empleos en la década 2010-2020, está comprobado y así lo demuestran las estadísticas, que en el mundo entero la mayoría de empleos son a través de las pequeñas y medianas empresas, sin embargo, en México aproximadamente el 60 por ciento de estas empresas de reciente creación entablan procesos de bancarrota dentro de su primer año de actividad debido en principio a la inestabilidad de la economía y a la excesiva burocracia de trámites fiscales y legales, la falta de crédito adecuado y oportuno, la falta de empleados capacitados, y las crisis económicas a las que han estado expuestas.
En México se consideran adultos mayores las mujeres y hombres con más de 60 años y se cuentan en total casi siete millones. El grupo de adultos mayores presenta lo que se denomina como de mayor “riesgo social” que resulta en parte inherente al avance de la edad y que se ve acentuada por las deficiencias de cobertura y calidad en materia de seguridad social y atención a la salud.
Así, 54 por ciento de la población de 65 a 69 años es derechohabiente de los servicios de salud, esta cifra se reduce escandalosamente conforme se cumplan más años. En cuanto al beneficio de pensión actualmente menos del 30 por ciento de adultos mayores la reciben.
Una interrogante respecto a la pensión universal prometida es la relativa a las mujeres adultas mayores y su posición en desventaja, cuando ellas han trabajado en casa sin remuneración; la condición de la mujer de edad avanzada, se ve afectada negativamente por la discriminación sufrida a lo largo de su vida; así, a manera de ejemplo, destaca el hecho de que registra menores niveles de escolaridad respecto a los hombres, además  de la reducida participación laboral limita sus posibilidades de generar ahorro para la edad adulta mayor o de acceder a una pensión.
Así las cosas ¿qué tanto podrá Peña Nieto con todo y sus reformas alcanzar sus propósitos?... Ver para creer.